Este bifolio forma parte de la campaña “Fiscalidad y Desarrollo” y presenta una crítica contundente a los privilegios fiscales otorgados en Honduras, señalando que estos no han generado desarrollo económico ni justicia social. Se expone que, a lo largo de las últimas décadas, el Estado ha renunciado a ingresos vitales al entregar exoneraciones y dispensas fiscales sin criterios técnicos ni rendición de cuentas, favoreciendo a grandes inversionistas por encima de las necesidades sociales de la mayoría.
El documento revela que en 2019, el sacrificio fiscal ascendió a más de 42 mil millones de lempiras, equivalente al 16% del Presupuesto General de la República y al 7% del PIB. Estos recursos, señala el análisis, podrían haber financiado áreas críticas como educación y salud. Sin embargo, se concentran en sectores como la minería, la energía y el turismo, que generan escasos empleos y altos impactos socioambientales.
Se critica también la regresividad del sistema tributario, donde los hogares más pobres destinan más del 42% de sus ingresos al pago de impuestos, en comparación con el 21% de los hogares más ricos. Además, se denuncia la inequidad de género en industrias como la minería, donde 9 de cada 10 trabajadores son hombres.
El bifolio concluye con propuestas claras: establecer una moratoria minera, revisar los contratos energéticos, eliminar el secreto fiscal sobre estas concesiones y garantizar participación ciudadana en la formulación de políticas fiscales. Se subraya que el modelo actual perpetúa la desigualdad y debe ser reemplazado por una estrategia de desarrollo justa, equitativa y sostenible.